Luego de 600 días de inactividad en la Plaza México, se retornó a esos días de lleno hasta el reloj en el coso más grande del mundo.

Pese a las pesadas y groseras protestas de grupos ambientalistas y defensores de los animales reinició esta fiesta en la colonia Nochebuena, en Insurgentes Sur.

Aunque no hubo un triunfador, los olés se escucharon de manera vibrante. A Joselito Adame sólo lo esperaron palmas/palmas, en tanto que Diego Silveti recibió ovación tras petición de palmas.

Así como al peruano Roca Rey, quien provocó molestia al dejar vivo a un toro llamado “Mar de nubes”, con el que tuvo silencio y hasta tres avisos.

Redacción

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